Vuelo a Bruselas (BRU)

Volar a Bruselas: consejos e información para tu viaje

La sede administrativa de Europa es una ciudad cosmopolita y de enorme riqueza histórica. Estas dos características convierten a cualquier viaje a Bruselas en una experiencia inolvidable, tanto para familias con niños como para grupos de amigos con ganas de pasárselo bien.

La ornamentada arquitectura de la Grand Place de Bruselas, en el corazón de la ciudad, contrasta con los modernos edificios administrativos de la Unión Europea, y esa mezcla confiere a la capital belga un encanto especial. Reserva tu vuelo a Bruselas con Brussels Airlines para disfrutar de una escapada al corazón del viejo continente.

Qué hacer en Bruselas

1. Un buen punto de partida durante tu viaje a Bruselas es la Grand Place. Fue reconstruida a finales del siglo XVII y está en pleno centro de la ciudad. En esta plaza confluyen siete de las calles más conocidas de la ciudad, que recorren el barrio histórico de Bruselas.
   
   
2. No puedes ir a Bruselas y dejar pasar la oportunidad de sacarte una foto con la estatua más icónica de la ciudad: el Manneken Pis. Eso sí, algunos turistas se sienten defraudados al verlo «en persona», porque mide poco más de 60 centímetros.
   
   
3. Las Galerías Saint Hubert son la calle comercial más famosa de la ciudad, ideal para salir de compras por la ciudad. Aquí encontrarás algunas de las pastelerías más lujosas del país, el lugar perfecto para degustar el riquísimo chocolate belga.
   
   
4. Si te apetece conocer un barrio menos turístico, al sur de Bruselas podrás visitar la zona alternativa de la ciudad. En los alrededores de la calle Américaine encontrarás tiendas de música repletas de discos de vinilo, tiendas con ropa de segunda mano y bares de moda.
5. La Casa Museo de Víctor Horta, declarada Patrimonio de la Humanidad, es de visita obligada para los amantes del Art Nouveau.
   
   
6. Los almacenes Waucquez son otro de los edificios icónicos de la capital belga. Aquí se encuentra el Centro Belga del Cómic, un espacio en el que los lectores de Tintín podrán descubrir más sobre los dibujos del inolvidable Hergé.
   
   
7. Para disfrutar del aire libre, nada como dar un paseo por el Parque de Bruselas. Se trata del parque urbano más grande de la ciudad y está flanqueado por el Palacio Real y el Parlamento Belga.
   
   
8. También vale la pena visitar el Atomium, el edificio más vanguardista –y uno de los más altos– de Bruselas, así como las maquetas del parque Mini Europa.
   
   
9. Si te gustan los mercados de segunda mano, no dudes en acercarte a la plaza del barrio de Marollen por la mañana, donde podrás encontrar algún tesoro de segunda mano.

Información práctica para tu viaje a Bruselas

• Cómo llegar al centro de la ciudad: Los vuelos de Brussels Airlines aterrizan en el Aeropuerto Internacional de Bruselas Zaventem (BRU), el mayor aeropuerto de Bélgica, situado a unos 12 km del centro de la capital. Desde el aeropuerto, el tren le lleva en 20 minutos al centro de Bruselas, aunque también puede optar por el taxi o el autobús. El segundo mayor aeropuerto del país es el de Bruselas-Charleroi (CRL), situado a unos 50 km al sur de la capital belga.
• Moneda: euro (€).
• Llamadas telefónicas y Wi-Fi: el prefijo de Bélgica es +32. En los restaurantes, hoteles, cafés y bares de Bruselas encontrarás puntos de conexión Wi-Fi gratuito.
• Tomas de corriente: tipo C, E y F (voltaje de 230 V, frecuencia de 50 Hz).
• Pasaporte y visado: Bélgica forma parte de la Unión Europea (UE). Los ciudadanos de la UE pueden viajar con pasaporte o documento de identidad nacional. Para otras nacionalidades, se recomienda confirmar con sus embajadas o consulados pertinentes si es necesario un visado.

Consejos útiles mientras preparas tu vuelo a Bruselas

• La mejor manera de conocer el centro de la capital belga es caminando. En algunas zonas hay cuestas, pero muchos de los lugares de interés de Bruselas están cerca entre sí. Además, las calles de la ciudad son muy pintorescas: vale la pena perderse por ellas para descubrir algunos tesoros ocultos.
• También es importante guardar energías: si estás cansado, el metro de Bruselas es un medio cómodo y barato para desplazarse entre los puntos de interés.
• Para evitar las colas en los museos, puedes comprar la entrada con antelación a través de su web oficial.
• Si te gustan los dulces, no te pierdas el exquisito chocolate belga. Es probable que al ver la enorme cantidad de recetas a base de chocolate que pueblan los mostradores de las pastelerías quieras comértelo todo, pero es mejor elegir: hay que reservar hueco para el resto de las delicias que te esperan en los restaurantes de Bruselas.

Expresiones locales y vocabulario básico

• Bélgica tiene tres idiomas oficiales, el neerlandés, el francés y el alemán. Pero si no hablas ninguno de ellos, no hay problema: en inglés podrás comunicarte perfectamente, y en la mayoría de los establecimientos suelen hablar un poco de español. Por algo es Bruselas la «capital de Europa».
• Para comer las auténticas patatas fritas belgas, pide «frietkot» o «friture».
• Si llueve mucho, cosa que ocurre en Bruselas con cierta frecuencia, probablemente escuches a alguien exclamar: Il drache!”. Estará queriendo decir “llueve a cántaros”. Y si te preguntan qué tal te lo estás pasando, responde “j’ai bon”; sabrán que estás disfrutando.

Conoce la vida cultural de la capital belga

• En Navidad, se celebran las fiestas Plaisirs d’Hiver o Winterpret (Placeres de Invierno), donde podrás ver las luces navideñas que decoran la ciudad o el impresionante árbol de la Grand Place.
• A principios de año tiene lugar la Feria de Arte de Bruselas, una cita obligada para los amantes de la pintura, la escultura o las antigüedades.
• Cada dos años, en Bruselas se puede ver a mediados de agosto uno de los eventos más pintorescos de Europa: la alfombra de flores.
• Aquí tienen también lugar varios festivales de música. Busca el que más se adapte a tu estilo y vive la música en tu viaje a Bélgica.
  Couleur Café, Listen Festival o Brussels Summer Festival: busca el que más se adapte a tu estilo y vive la música en tu viaje a Bélgica.

¿Cuál es la mejor época del año para volar a Bruselas?

El clima en Bruselas es bueno en primavera, verano y otoño, y bastante frío y húmedo en invierno. Si quieres aprovechar las zonas verdes de la ciudad sin preocuparte de las bajas temperaturas y la lluvia es recomendable que viajes entre abril y octubre.

En invierno, la fecha más especial para visitar la capital belga es la Navidad. Calentarse con un vaso de vino caliente o pasear por algún mercadillo navideño es un plan inolvidable.

Vuela a Bruselas y descubre su cultura gastronómica

Los puestos callejeros y restaurantes en Bruselas suelen servir comida bastante copiosa, no en vano uno de los acompañamientos más famosos de todo el país son las patatas fritas. Si estás a dieta, prepárate para caminar por la ciudad con los ojos cerrados, porque estos son algunos de los platos típicos de Bruselas:

• Los mejillones con patatas fritas: hay un sinfín de recetas, pero la más auténtica es la de los mejillones a la marinera; cocinados con vino blanco, ajo, cebolla y perejil.
• La carbonade flamande, un guiso tradicional de carne, cebolla, cerveza, tomillo y laurel.
• El waterzooi, un guiso típico del norte del país que se elabora tanto con pescado como con pollo.
• Especialidades belgas como la cerveza, el chocolate y los gofres.

Bélgica: el mundo entero a menos de una hora de Bruselas

Bélgica tiene de todo: mar y montañas (o, mejor dicho, colinas), restaurantes con pedigrí y puestos callejeros de patatas fritas, ritmos congoleños y dance belga, arte medieval y arquitectura vanguardista. Y lo más llamativo es que las distancias entre todas estas maravillas nunca superan la hora.

Amberes, la capital de las últimas tendencias

¿Una buena razón para viajar a Amberes? Ésta es la ciudad de los vanguardistas; siempre lo ha sido. Se nota en la arquitectura (no puedes perderte la Estación de trenes y las Oficinas Portuarias), en los museos y hasta en el plato. ¿Dónde si no un chef con tres estrellas Michelin abriría un puesto de patatas fritas de lujo? Exactamente: en la preciosa ciudad junto al río Escalda.

La creatividad siempre ha sido una parte inherente de Amberes: ya en los siglos XVI y XVII, Amberes era el hogar de grandes artistas como Rubens y Van Dyck, y en los siglos XX y XXI la ciudad es la inspiración de diseñadores de moda como Dries Van Noten y Walter Van Beirendonck.

Aparte de las muchas actividades culturales, también cuenta con excelentes restaurantes, bares y discotecas. Si quieres ir de compras, Amberes es el verdadero paraíso: cada primer domingo del mes están abiertas las tiendas. Como los diamantes de Amberes, la ciudad brilla con una notoria variedad arquitectónica, desde edificios medievales hasta mansiones modernistas y el precioso MAS o Museum Aan de Stroom.

Nuestras sugerencias:

• COMPRAS: en la ciudad más sartorial de Bélgica, las tiendas de moda están en todas partes. Para encontrar la mejor moda de Amberes, empieza por la calle Nationalestraat y continúa hacia Het Zuid (zona sur).
• OCIO: recorre el moderno barrio de Zuid, donde encontrarás algún que otro cómodo café donde descansar.

Gante, la capital hipster de Bélgica

¿Por qué Gante es tan especial? Es sencillo: combina perfectamente el respeto por lo antiguo con el carácter rebelde del vanguardismo. Aquí pasas sin darte cuenta del medieval Castillo de los Condes al Museo del Diseño, paseas por la experimental calle de los grafitis hasta la majestuosa Catedral de San Bavón que alberga el Cordero Místico, puedes degustar las salchichas más trendy y comerte de postre una auténtica golosina de Gante: el neuzeke. Según Lonely Planet, Gante es el «secreto mejor guardado de Europa» y nosotros te lo confirmamos.

Si lo tuyo es aventurarte por tu cuenta lejos del barullo turístico, Gante es tu sitio. Apreciada por su brillante mezcla entre el pasado y el presente, la ciudad alberga uno de los mejores paisajes europeos de canales, chapiteles y antiquísimas y espléndidas casas. Pero no se trata simplemente de un lugar para relajarse. También es la ciudad universitaria más grande de Flandes, lo que significa que el viajero encontrará cafés suficientes en los que alargar las tardes, restaurantes a buen precio y un ambiente relajado.

Bajo la atenta mirada del Castillo de los Condes de Gante, la ciudad cuenta con una Ópera, 18 museos, 100 iglesias y más de 400 edificios históricos. Lo más visitado de Gante es el célebre políptico La adoración del cordero místico o el Altar de Gante, obra de los hermanos Jan y Hubert van Eyck de 1432. Todavía se expone en su ubicación original, la Catedral de San Bavón.

Nuestras sugerencias:

• GASTRONOMÍA: Podrás disfrutar de variadas opciones vegetarianas en la capital vegetariana de Europa.
• COMPRAS: ¿A la búsqueda de piezas únicas? Da un paseo por los alrededores del Vrijdagmarkt.

Brujas, la capital del patrimonio cultural

El corazón de Brujas, rodeado por un anillo de canales casi continuo, es el ejemplo mejor conservado del Flandes medieval. El centro de la ciudad es la postal perfecta, y es que es casi imposible hacer una mala foto. La belleza y la cultura de esta ciudad inolvidable se puede explorar fácilmente a pie, en barco a través de sus tranquilos canales, o en carruaje tirado por caballos sobre calles adoquinadas. A pesar de que Brujas es una ciudad pequeña, te llevará más de un día explorar todos sus tesoros arquitectónicos y artísticos, folclore, tiendas de chocolate, tiendas de encajes y restaurantes locales.

El centro histórico de Brujas es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y está lleno de lugares de interés. Brujas es tan mágica que se asemeja a un escenario de película. Resulta oportuno dado que la película Escondidos en Brujas de 2008 se filmó en escenarios reales de la ciudad. Dicha película, protagonizada por Ralph Fiennes y Colin Farrell, cuenta la historia de dos sicarios que se esconden en la ciudad tras un encargo complicado.

Durante la Edad de Oro de Brujas, en el siglo XV, las bellas artes prevalecieron. A raíz de la prestigiosa dinastía borgoñona, los grandes Primitivos flamencos se hicieron famosos. Las obras de renombre mundial de Jan Van Eyck, Hans Memling y las de otros prominentes maestros flamencos se pueden admirar en el Museo Groeninge, el Hospital de San Juan, la catedral de San Salvador y la Iglesia de Nuestra Señora.

Nuestras sugerencias:

• COMPRAS: No puedes irte de Brujas sin visitar alguna de sus chocolaterías más conocidas, pero tampoco sin visitar el lugar de nacimiento de las populares gafas Hoet.
  
• OCIO: Visita el famoso 't Brugs Beertje, donde se ofrecen más de 300 tipos diferentes de cervezas, incluyendo la Brugse Zot, la cerveza oficial de Brujas.

Lovaina, la capital de las ideas

Lovaina es una ciudad polifacética. Por un lado, cuenta con un patrimonio centenario. Su Ayuntamiento, construido en el siglo XV en estilo gótico tardío, es una joya arquitectónica, así como también lo son las numerosas iglesias góticas y barrocas. La Universidad y el Jardín Botánico son los más antiguos del país. Aquí también se encuentra la cervecería Stella Artois, que ofrece una historia de tradición y artesanía. Por el otro, la universidad atrae a la ciudad a gente joven, que dota de un ambiente apasionante e innovador a la ciudad, especialmente notable en la plaza Oude Markt, el corazón de la vida nocturna.

Tanto si buscas saciar la sed de conocimiento o simplemente saciar la sed, Lovaina es el lugar ideal. Esta ciudad juvenil, a menos de media hora en tren de Bruselas, es el hogar de una de las universidades más antiguas de Europa, KU Leuven, y la historia está presente en cada rincón de sus calles. La universidad y sus estudiantes tienen un vínculo especial con Lovaina, que nació con ella en 1425. Tiene sus orígenes en el centro de Lovaina y sus edificios universitarios ocupan muchas de las plazas y calles de la ciudad. Los estudiantes más afortunados tienen el privilegio de vivir en el Gran Beguinaje del siglo XIII, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Lovaina es además la capital por excelencia de Bélgica en cuanto a la elaboración de cerveza: no es poca cosa en un país donde se producen cientos de variedades. La ciudad es, de hecho, la sede de AB Inbev, la fábrica de cerveza más grande del mundo, famosa por la cerveza Stella Artois.

Lovaina es el lugar ideal para el viajero curioso que tiene tiempo para explorar. Es una ciudad acogedora y se puede llegar fácilmente a pie o en bicicleta a todas partes.

Nuestras sugerencias:

• COMPRAS: las calles Parijsstraat y Mechelsestraat y el mercado Vismarkt: el «lugar de compras» para los que prefieren lo diferente. Con encantadoras boutiques, restaurantes y tiendas gastronómicas.
• OCIO: prueba las cervezas Con Domus y Nostra Domus en la cervecería Domus.

Malinas, la capital de la diversidad

Malinas está a dos pasos de todo, situada en el corazón de Flandes y a caballo entre Bruselas y Amberes. Del aeropuerto de Bruselas a Malinas hay apenas 11 minutos en tren. Se puede llegar a pie a todas partes, por lo que puedes ir paseando de una atracción turística a otra.

Malinas es una ciudad pequeña y pintoresca con mucho encanto e historia, pero a la que probablemente se conoce más por su escuela de carillones. Aquí vienen estudiantes de todo el mundo para aprender el arte de tocar las campanas de iglesia. Es una ciudad próspera con tiendas pintorescas, áreas libres de coches y pequeñas y acogedoras plazas y la gracia de sus iglesias y palacios atraen a todos por igual. Con atractivos para todas las edades, desde el Museo del Juguete, Technopolis o Planckendael a las cervecerías más antiguas del país, no es menos relevante que cuenta con más de 336 edificios y monumentos protegidos y aparece en la Lista del Patrimonio Mundial de la Unesco nada menos que cinco veces.

Nuestras sugerencias:

• GASTRONOMIÍA: en la brasserie Het Anker se sirven platos clásicos a base de cerveza y en Lam'eau puedes degustar especialidades franco-belgas en una antigua cervecería al lado del río Dyle.
• COMPRAS: en Kaashandel Schockaert se pueden encontrar más de 300 tipos de quesos, incluyendo el típico Gouden Carolus Brouwerskaas, hecho con la cerveza local.

Ypres, la capital de la paz

Ypres puede enorgullecerse de su pasado medieval, época durante la cual constituyó un floreciente centro comercial del paño en Flandes. De ello da testimonio la Lonja de Paños o Lakenhalle, hoy sede del museo de fama internacional In Flanders Fields y del Museo de Ypres. Pero fue la Primera Guerra Mundial, durante la cual Ypres fue destruida casi por completo, lo que más marcó a la ciudad. Cada día a las 8 de la tarde se toca El toque de retreta (‘Last Post’) bajo la Puerta de Menin. Otros museos, localizaciones de la Gran Guerra, cementerios y diversos vestigios en los alrededores de Ypres dan testimonio de lo que pasó aquí a principios del siglo XX.

El centro de Ypres ofrece al visitante un gran número de cómodos cafés, espléndidos restaurantes, tiendas y encantadoras propuestas de alojamiento que te ofrecen todo lo necesario para que tu estancia sea inolvidable. La región de los Campos de Flandes, localmente conocida como Westhoek, es el lugar donde recordar y honrar la memoria de las 500 mil víctimas de la Primera Guerra Mundial en Flandes. A la vez, es una región hospitalaria y acogedora con preciosos paisajes.
Pasea por el centro urbano de Ypres y descubre los alrededores en bicicleta, scooter o minibús.

Nuestras sugerencias:

• El local Sint-Arnoldus (St Arnoldus Biercafé) ofrece nada menos que 25 cervezas locales de barril.

Charleroi, la capital del dinamismo

Charleroi, una ciudad con mil caras, a la vez burguesa e industrial, ajetreada y apacible, bohemia y puntera, a imagen y semejanza de sus habitantes. Es una fuente de originalidad donde la cultura alternativa ha encontrado un suelo fértil: los artistas pueblan antiguas fábricas, las paredes  se convierten en lienzos gigantescos para los artistas callejeros, el Ring se fotografía y el metro se convierte en transporte turístico.

Al igual que otras ciudades industriales como Liverpool, Birmingham, Bilbao o Metz, que han optado por una política de regeneración urbana en la que la cultura ha jugado un papel determinante, Charleroi está en plena metamorfosis.

Eupen, la capital de la naturaleza

Eupen es la capital de Ostbelgien, de los cantones del Este, y se encuentra en el cruce de las culturas románica y germánica. Plurilingüe y tolerante, la ciudad, que quedó a salvo de la guerra, conserva un magnífico patrimonio que data de los siglos XVIII y XIX.

Rodeada de bosques, Eupen se halla a las puertas de una zona pantanosa excepcional: Las Hautes Fagnes. El Hertogenwald (bosque de Les Ducs), las turberas del parque natural de Las Hautes Fagnes y la presa del valle de Vesdre hacen de Eupen un punto de partida excepcional para los amantes de la naturaleza.

Un gran número de museos, como el del Chocolate, el Ikob, el de Arte Contemporáneo o el Museo Histórico de la Ciudad, esperan tu visita. Los excursionistas y los ciclistas encontrarán una amplia red de recorridos y senderos acondicionados (itinerarios en Eupen, RAVel). Esta ciudad enclavada en el Vesdre, que antaño era rica debido a la industria textil, rebosa de suntuosas casas burguesas, iglesias y fuentes. El nuevo centro de la ciudad, con sus acogedoras plazas llenas de terrazas, invita a pasear. Los aficionados a la gastronomía apreciarán las riquezas culinarias de la región. Disfruta de la calidad de vida que ofrece la ciudad de Eupen.

Lieja, la capital de la arquitectura

A solo una hora en tren de Bruselas, la tercera ciudad más poblada de Bélgica es ideal para una escapada de un fin de semana. En cuanto el tren se para en Lieja, lo primero que ves es la vanguardista estación de trenes de Lieja Guillemins, diseñada por Calatrava. Recientemente, numerosos edificios se han sometido a una profunda renovación, como la famosa Ópera Real de Valonia; el Teatro de Lieja; el Grand Curtius, que cuenta con una impresionante colección de piezas históricas; el espléndido museo de arte La Boverie, que trabaja en colaboración con el Louvre de París, y el Museo de la Vida valona, con todos sus espectáculos sobre la diversidad cultural de Lieja. También deben mencionarse otros edificios emblemáticos, como la Torre de las Finanzas, el centro comercial Mediacité diseñado por Ron Arad, el escaparate del diseño Design Station de Valonia, la pasarela La Belle Liégeoise, etc. Todos ellos dan fe de una renovación urbana espectacular.

El resto de la historia de Lieja se puede encontrar aún en la antigua Ciudadela, que ofrece una vista panorámica de la ciudad, y el museo Archéoforum, situado debajo de la plaza San Lamberto. Además, la amplia zona comercial de Lieja cuenta con un montón de boutiques de moda, tiendas de diseño, cafés y bares-restaurantes con gastronomía de la región, ideales para disfrutar de la hospitalidad liejense.

¿Por qué no aprovechar el alquiler gratuito de bicicletas o patinetes para descubrir Lieja de una forma diferente? Lieja está situada a orillas del río Mosa, que divide la ciudad en dos partes. La Outremeuse, literalmente, la parte del otro lado del río Mosa, es famosa por su atmósfera creativa y folclórica. Un elemento característico del folclore de Lieja son los famosos Tchantchès, unas marionetas que expresan el carácter testarudo y rebelde, aunque de buen corazón, de los habitantes de Lieja. En el Museo de los Tchantchès es posible disfrutar de un espectáculo de marionetas mientras se conoce la historia de la Outremeuse gracias a Tchantchès y a su mujer Nanesse.

Nuestras sugerencias:

• GASTRONOMÍA: en cuanto a la típica y deliciosa cocina liejense, disfruta de la cálida atmósfera de Le Bistrot d’en Face y La Maison du Pèkèt.
• COMPRAS: para vivir una experiencia de compras auténtica, evita las tiendas de marca y visita los muchos mercados de la ciudad.

Lovaina La Nueva, la capital universitaria

Ubicada en el epicentro del Brabante Valón, a 30 minutos de Bruselas, Ottignies-Lovaina La Nueva está compuesta de dos centros urbanos. El acogedor municipio de la Universidad Católica de Lovaina, Ottignies, cuenta con numerosos tesoros culturales y turísticos gracias a la construcción de la nueva ciudad: Lovaina La Nueva, integrada de forma armoniosa en el paisaje.

Desde el comienzo, Lovaina La Nueva, que nació como ciudad universitaria, fue concebida basándose en el modelo de las ciudades medievales italianas y con la idea de que fuera accesible para todos. Como resultado, cuenta con un centro urbano peatonal, de dimensiones asequibles, con todas las facilidades de una ciudad que ofrece convivencia y un ambiente inigualable.

Lovaina La Nueva rebosa de atractivos turísticos como el Museo Hergé y el Museo L (museo universitario), obras de arte en cada esquina, parques donde pasear, un bosque de 220 hectáreas con una reserva natural y numerosos senderos, cafés y restaurantes.

Ejemplo único de creación urbana, que combina el encanto de la montaña con todas las ventajas de una ciudad moderna, Lovaina La Nueva es una ciudad en constante cambio.

Mons, la capital de la cultura

Bajo los focos de Mons 2015, Capital Europea de la Cultura, la región se dinamizó con múltiples infraestructuras culturales. En Mons se concentró esta transformación con la apertura de más de cinco museos. Con más de dos millones de visitantes registrados mientras fue capital europea, la ciudad de Mons ha adquirido una relevancia cultural inédita con una oferta dirigida a todos los públicos.

No te pierdas la visita de centros como la Artothèque, la Casa Losseau, el BAM, el Campanario, el Mundaneum, el Museo regional de las Ciencias Naturales, el Parque de Aventuras Científicas (Frameries), las casas de Van Gogh (Cuesmes y Wasmes) y el Museo de la Feria y de la Memoria (Saint-Ghislain), por citar algunos ejemplos.

Para los interesados en arquitectura y diseño, merece la pena una visita al Centro del Diseño, de proyectos urbanísticos tan importantes como el MICX, diseñado por el arquitecto Daniel Liebeskind, o incluso del proyecto de la nueva estación de Mons, con ideas de Santiago Calatrava.

Nuestras sugerencias:

• COMPRAS: Pásate por visitMons, el lugar perfecto para llevarse un recuerdo de la ciudad y un escaparate para artesanos locales.

Namur, la capital de Valonia

Namur, hija del agua, es una ciudad cautivadora. Su centro, en parte peatonal, te invita a deambular por sus comercios o a lo largo del río.

Nuestras sugerencias:

• GASTRONOMÍA: el veterano Le Grill des Tanneurs , ubicado en el primer piso del Hotel des Tanneurs en Namur, ofrece una cocina a la parrilla generosa y de calidad.
• COMPRAS: renueva tu biblioteca de cómics en b.d.Librairie.

Tournai, capital de las impresiones

Con sus 2000 años de historia, Tournai es la ciudad más antigua de Bélgica. ¿Sus dos monumentos más impresionantes? El campanario y la catedral, declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Pero eso no es todo: la ciudad está llena de otros tesoros arquitectónicos fáciles de descubrir a pie: las casas románicas, góticas o estilo Luis XIV o el museo de Bellas Artes, de estilo Art Nouveau, que alberga una excelente colección de obras impresionistas.

En Tournai podrás pasear tranquilamente por los muelles habilitados del río Escalda, seguir uno de los circuitos que propone la Oficina de Turismo, saborear especialidades locales como las cervezas artesanales, las patatas fritas belgas, el conejo a la Tournaisienne u el pastel Clovis y, por qué no, disfrutar en los muchos eventos que se celebran durante todo el año.

Ostende, moderno y mundano

Con un litoral de más de ocho kilómetros de arena, Ostende es el destino más popular de la costa belga. Después de un baño en el mar del Norte, encontrarás numerosas tiendas, restaurantes y bares en un paseo por la Promenade. Como destino para una escapada o unas vacaciones, Ostende cuenta con un calendario de eventos que se extiende durante todo el año con, por ejemplo, el festival de teatro Oostende at Anchor, el mercadillo de Navidad o las festividades de Carnaval que culminan con el célebre Baile de la Rata Muerta.

Ostende ofrece también una gastronomía de alto nivel gracias a la cual se pueden saborear pescados y mariscos fresquísimos. Hay restaurantes para todos los gustos y bolsillos. Las especialidades incluyen doradas, croquetas de gambas y tomates rellenos de gambas. Después de la cena, vive la noche en los muchos bares, clubs y salas de cine de la ciudad.

Nuestras sugerencias:

• GASTRONOMÍA: los más tradicionalistas comen los mejillones solo entre septiembre y abril. Si vas en busca de mejillones, aquí podrás degustar mejillones cocinados de más de 12 maneras distintas y marisco fresco
• COMPRAS: las especialidades locales se encuentran en el mercado de Wapenplein.